Reverse Mentoring

En el ámbito del entrenamiento de las habilidades directivas, uno de los conceptos o técnicas más nombrados en los últimos años es el mentoring; una persona, en la mayoría de los casos de nuestra propia organización y generalmente mayor que nosotros, nos enriquece con su experiencia.

Sin embargo, en los tiempos que corren, los que no somos nativos digitales, debemos subvertir este concepto y hablar del reverse mentoring, ya que nuestros mentores van ser, en el 99,9 % de los casos, más jóvenes que nosotros. Esta es la primera reflexión que nos solemos hacer los "inmigrantes digitales", los que demasiadas veces hacemos impresiones innecesarias en lugar de verlas en la pantalla o empleamos horas en los que cualquier niño maneja con total soltura, como por ejemplo, el mando de la Tv por cable, o la programación de la grabación de un programa.

Me recuerdo no hace mucho llamando a la puerta de la vecina en un departamento en Nueva York, para pedirle a su hijo que me pusiera en funcionamiento la TV y me deshiciera el nudo que los 3 mandos a distancia que me encontré en la casa habían organizado en mis neuronas. Por supuesto, el niño resolvió el tema en unos 3 minutos cuando yo llevaba más de 1 hora peleándome con los 3 mandos.

Pero si estamos atentos, no sólo es este mundo en el que debemos de aprender de nuestros jóvenes; cada día podemos y debemos aprender un montón de cosas de esos a los que muchas veces nos referimos con cierto tono despectivo, por su falta de valores, de ideales , o simplemente por la forma en que sujetan sus inmensos pantalones, varias tallas mayores de lo necesario. Pero para ello, es esencial que queramos seguir aprendiendo, que mantengamos el radar y la alerta puesta a las cosas que suceden a nuestro alrededor. Es una cuestión de actitud. Debo confesar, con mucha satisfacción, que la mayoría de lo que he aprendido en los últimos tiempos ha venido de gente bastante más joven que yo. Y desde luego, en el último año, de gentes insultantemente más jóvenes que yo. Un gustazo, oiga.

Teresa Vigón
Directora de Consultoría Futuver México